Ayer, 5 de marzo de 2019, falleció un trabajador en la reforma de un supermercado en Alberic (Valencia).

Estaba trabajando en la cubierta, y de repente se hizo un agujero bajo sus pies. Según el diario Levante, impactó con el suelo, a 8 metros. Una de estas cosas que nunca crees que van a ocurrir. No quieres ser tú, ni que sea tu amigo, ni tu compañero. Y un día, sencillamente pasa.

La verdad, no me esperaba un accidente así en esta reforma. Cuando cruzabas por delante de la obra siempre veías a todo el mundo con su casco, chaleco y otros EPIs. Llamaba la atención. Pero salta a la vista que, trabajar de forma segura no es solo ponerse el casco.

Accidentes como este hacen plantearse muchas cosas. Hay gente que se toma la seguridad en la obra como si fuera broma. No va con ellos. Y cuando te ven con tus EPIs eres un exagerado. Pero lo exagerado es que una familia pierda un ser querido porque un día fue a trabajar.

La seguridad en las obras de construcción es cuestión de todos y cada uno de los que estamos presentes. Así que la próxima vez que un compañero te pregunte: «¿No te pones el casco?», o te diga que estás haciendo algo de forma poco segura (para ti o para los demás)… en vez de enfadarte o reírte, da las gracias y hazle caso.

Mis condolencias a los compañeros, amigos, y especialmente, a la familia.